14 de febrero: Día Mundial de la Energía
Autora: Tania Mijares
Desde 1949 Naciones Unidas estableció, el 14 de febrero como el Día Mundial de la Energía, para invitar a reflexionar sobre la eficiencia energética y las alternativas de producción.
Decidimos celebrarlo, conociendo más sobre la visión para México de una de las candidatas a la Presidencia, por ello acompañamos a la Lic. Rosanety Barrios quien actualmente funge como Coordinadora de las Mesas de Energía de la Ing. Xóchitl Gálvez quien nos compartió el diagnóstico y algunas medidas que han identificado como prioritarias en la materia.
México puede ser un país de clases medias, con seguridad, con un servicio de salud de calidad, educación de excelencia y empleos suficientes y bien pagados. Para lograrlo es necesario trabajar en distintos sectores e implementar políticas – en algunos casos bastaría solo con cumplir la Ley- que ayuden a una verdadera renovación y crecimiento en el país.
Una de las principales herramientas será contar con una política energética que tenga tres pilares fundamentales:
- Estado de Derecho,
- Transparencia y rendición de cuentas; y,
- Un enfoque hacia las mujeres, esto para reducir la brecha de género.
La energía debe provenir de fuentes limpias y tener un precio competitivo. En el caso de CFE, señalo que es importante fortalecerla donde todavía es competitiva y que contribuya a disminuir la pobreza energética nacional, señalo que, en México, aunque no existe una cifra oficial, se estima que el 36.7% de los hogares mexicanos la padecen. La pobreza energética no se trata únicamente sobre tener o no acceso a la electricidad, sino de contar con los bienes económicos que permitan a los hogares satisfacer sus necesidades de energía. Esto implica tener un suministro eléctrico constante y de calidad que sea suficiente para alcanzar confort térmico, contar con un refrigerador eficiente y estufas de gas o electricidad, entre otras necesidades como el entretenimiento o la iluminación.
Otro punto importante que mencionó es el hecho que en México no estamos destinando inversión de infraestructura directamente al “Nearshoring” y para aprovechar este momento, es necesario contar con una política energética sólida que nos permita dotar de energía a los nuevos proyectos a la vez que nos permite tener energía suficiente para alcanzar la seguridad energética. Esta energía deberá provenir de fuentes limpias para cumplir con nuestros compromisos internacionales en Cambio Climático y tener un precio accesible para toda la población. Todo en coordinación Gobierno, empresas y sociedad civil.
Para B + F la promoción y acompañamiento de proyectos de energía renovable y limpia representa una parte medular, pues desde nuestra fundación hemos trabajado en promover fuentes limpias de energía, reducir riesgos, identificar oportunidades y desarrollar las mejores soluciones técnicas y legales posibles para crear valor ambiental, económico y social en proyectos de energías renovables y de eficiencia energética.